Varios ingredientes podrían alimentar la marcha del 28 de enero como las sanciones por corrupción al empresario Ángel Rondón por parte del gobierno de los Estados Unidos y la presentación de la acusación que deberá hacer la última semana de este mes el Ministerio Público contra los acusados del caso Odebrecht. El movimiento social Marcha Verde tiene en agenda una concentración verde para el próximo 28 de enero frente al Palacio Nacional; ese evento será clave para medir que sigue fuerte y vigoroso como demostró en los primeros siete meses del 2017, o si por el contrario, ha perdido apoyo como han sostenido algunos analistas, basados en la pasividad que exhibió el movimiento en el último tramo del pasado año. La falta de propuestas del movimiento para resolver los problemas que reivindica, la corrupción y la impunidad, unido a solicitudes inviables como la renuncia del presidente Danilo Medina y el sometimiento a la justicia de Medina y una investigación penal contra los expresidentes Leonel Fernández e Hipólito Mejía, podrían haber generado la percepción de declive del Movimiento Verde.
El día 28 será de otra prueba para la Marcha Verde
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