Pese a que tanto ella como su famosa familia están íntimamente vinculadas a la televisión estadounidense gracias a los programas de telerrealidad que protagonizan, Kim no quiere ser quien establezca los pasos profesionales de su hijo. Así, la pareja de Kanye West no va a permitir que su bebé -que nacerá en junio-aparezca ante la cámara hasta que sea mayor para decidirlo por sí mismo.
»El bebé no aparecerá en nuestro reality. Cuando él o ella exprese lo que quiere hacer, aparecerá si quiere», comentó Kim en el programa de Jimmy Kimmel. Después de que el conocido presentador bromeara sobre que el bebé se sentirá apartado al ser el único miembro de la familia que no participe en los programas, Kim aseguró que tanto ella como Kanye desean que su hijo se mantenga alejado de los focos. »Es una decisión difícil. Desde el principio lo ha sido, pero es la opción que Kanye y yo hemos decidido seguir. Vamos a intentar mantener su vida de manera tan privada como nos sea posible», añadió.