En los meses de mayo a agosto de 2012, El Ministerio de Obras Públicas otorgó un festival de contratos para infraestructuras, la mayoría de ellos por decreto, por un monto ascendente a 12 mil millones de pesos. La gestión del anterior ministro, Víctor Díaz Rúa, en vez de preparar la cartera para el traspaso de mando al hoy presidente Danilo Medina y su gabinete, emprendió una ofensiva de 23 contratos de obras para 12 provincias, una carrera que se inició al final de la campaña por las elecciones presidenciales y se prolongó por el período de transición.
Para Rosalía Sosa, coordinadora de Participación Ciudadana, es injustificable que en vez de “poner la casa en orden para la entrega”, se comprometan recursos por un alto monto del presupuesto. Resaltó que el déficit que dejó la administración del ex presidente Fernández encontró allí una alta proporción de los excesos.