El ex primer ministro Silvio Berlusconi fue condenado a siete años de cárcel por el caso Ruby, por el que estaba acusado de prostitución de menor y abuso de poder, una sentencia severa que amenaza la estabilidad del actual gobierno de coalición italiano. Después de casi siete horas de deliberaciones, las magistradas del Tribunal de Milán condenaron al magnate de las comunicaciones y líder de la derecha italiana a una pena mayor de la solicitada por la fiscalía y dispusieron su inhabilitación de por vida de todo cargo público. Se trata del primer fallo por el llamado caso Ruby, ya que tiene dos oportunidades más para recurrir la sentencia, según el derecho italiano.
El ex jefe de gobierno, de 76 años, fue condenado por haber pagado en 10 ocasiones a “Ruby” –el apodo de una exuberante marroquí menor de edad en el momento de los hechos–, sus servicios sexuales y por haber presionado a la policía para que la liberara tras su detención por hurto, en mayo de 2010.