El mes de octubre está lleno de efemérides para Katy Perry-el 23 se cumplen dos años de su boda con Russell Brand y el 25 es su cumpleaños-, y aunque al principio la cantante temía la llegada de estas fechas, ahora ha decidido afrontarlas con optimismo y organizar una fiesta para conmemorar su divorcio, que se formalizó en julio.
«Katy no quiere pasar estas fechas sintiéndose mayor y deprimida, así que va a celebrar su 28 cumpleaños rodeada de amigos y brindando además por su divorcio, que supone para ella toda una liberación. Ha pasado de temer su llegada, a estar ilusionada por su cumpleaños», reveló una fuente. «No quiere llamar demasiado la atención con este asunto, así que no habrá descontrol alguno en Las Vegas. En su lugar, Katy celebrará su fiesta post divorcio en su propia casa y solo con sus amigos más cercanos», explicó la misma fuente.