Autoridades del Ministerio de Salud Pública admitieron que se cometió un error al tirar a la basura miles de expedientes con las informaciones clínicas de los pacientes que se atendieron en el demolido hospital Luis Eduardo Aybar. Mientras que el director del Archivo General de la Nación, Roberto Cassá, califica de aberrante la destrucción de las historias clínicas, y dijo que viola los términos de la Ley General de Archivos número 481-08, porque ninguna institución del Estado puede destruir documentos, si no cuenta con la aprobación de las instancias establecidas en la normativa, que en su artículo 70 dispone sanciones para los casos de deterioro o destrucción de cualquier naturaleza.
Contrario a la gran cantidad de papeles tirados en las instalaciones del viejo centro asistencial, el director de la Regional Metropolitana de Salud, Félix Hernández, asegura que fueron una minoría los documentos destruidos, y que la gran mayoría están en cajas dentro de un almacén del hospital, y que no pudo mostrar, porque no encontraron las llaves para abrir. Dijo que desde el 2003, en el centro de salud se inició un proceso de digitación de las informaciones básicas de los pacientes, incluyendo sólo nombres, dirección y número de expediente.