Exguerrillera presa en la dictadura, la primera mujer presidente de Brasil, Dilma Rousseff, de 66 años, es la favorita para las elecciones presidenciales del próximo domingo. Cuando el 1 de enero de 2011 recibió la banda presidencial de su padrino político, el popular Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010), los brasileños apenas la conocían. Nunca había disputado un cargo público en elecciones, siempre había preferido cargos gerenciales.
En el gobierno de Lula fue su fiel ministra de Energía entre 2003 y 2005 y jefa de gabinete entre 2005 y 2010. Rousseff se enfrentará con su rival socialista Marina Silva y con el socialdemócrata Aecio Neves en las elecciones, para las que cuenta con 40% de la intención de voto, contra 24% de la ecologista y 21% de Neves, según Datafolha. En un posible balotaje el 26 de este mes, Rousseff también es favorita: contra Silva ganaría por 48% contra 41%, apunta Datafolha.