La viuda del conductor del auto en el que falleció el actor Paul Walker ha presentado una demanda contra el fabricante de automóviles Porsche, al que hace responsable del accidente mortal ocurrido en noviembre de 2013. Kristine Rodas, la que fuera esposa de Roger Rodas, ha llevado el caso ante la Corte Superior del condado de Los Ángeles. La mujer afirma en su reclamación legal que un fallo mecánico relacionado con la suspensión en el Porsche Carrera GT que conducía su esposo Roger Rodas impidió que éste pudiera mantener el control del vehículo, que terminó por estrellarse contra un farol.
Tras el choque, el carro explotó y Rodas culpa a Porsche porque el automóvil carecía de suficiente protección contra impactos propia de vehículos de carrera. “Carrera GT es lo más parecido a un carro de carreras que jamás tendremos”, ha manifestado la mujer, que alega que Porsche no ha tomado medidas a pesar de que había precedentes mortales similares.