Son ampliamente conocidos los beneficios de la aplicación de todo tipo de Terapias Físicas en Medicina Humana en todas las patologías Neuro – Músculo – esqueléticas.
Durante los últimos años se están aplicando en Medicina Veterinaria, con resultados equivalentes, o en algunos casos, superiores a los de humana.
Se está reconociendo en Argentina, y en el Mundo la importancia de acompañar procesos dolorosos con Terapias Físicas, como complemento de cualquier otro manejo médico o quirúrgico, relacionado con el aparato locomotor y el raquis.
Terapia Física y Rehabilitación en Medicina Veterinaria
El tratamiento se realiza en sesiones en las que progresivamente, se agregan agentes físicos (Electroterapia, Magnetoterapia, Láser, Ultrasonido, etc.) así como, masajes, ejercicios, hidroterapia, según las características de la patología, del paciente y desde ya el momento de evolución del cuadro clínico presente.
Los resultados se observan gradualmente teniendo claro que el protocolo de trabajo debe cumplir un orden prefijado de objetivos.
Entre la 3º y 5º sesión, ya se evidencia el efecto analgésico y antiinflamatorio.
Es en éste momento que se pueden intensificar los masajes y ejercicios para mejorar el rango de movimiento y por lo tanto la movilidad en su totalidad, según la patología y la respuesta obtenida, recuperando así la biomecánica. Siempre evaluando el grado de evolución del caso.
El tiempo total de tratamiento varía según las características del caso.
Terapia Física y Rehabilitación en Medicina Veterinaria
Teniendo en claro que es un complemento terapéutico podemos aplicarlo en diferentes patologías, dentro del área de la: Ortopedia, Traumatología, y Neurología, tanto en jóvenes como adultos y gerontes de distintas especies como caninos, felinos, primates y quelonios.
La Terapia Física no requiere sedación, y es generalmente bien tolerada por el paciente. Siempre hay que tener en cuenta el protocolo de trabajo en las distintas etapas del tratamiento según la patología.
Se puede acompañar con medicación, en especial en patologías altamente dolorosas durante el primer período hasta lograr los efectos clínicos deseados.
Algunos ejemplos de patologías a tratar son: Espondilosis – Espondiloartrosis – Lesiones tendinosas – Discopatías – Lesiones ligamentosas – Artrosis: – Cadera – Rodilla – Procesos inflamatorios – Hombro – Codo – Edemas – Parálisis: Ciático – Radial – Heridas – Úlceras – Paresias – Tetraplejías – Bursitis