Calle 13 brindó una intensa y soberbia presentación en el Festival de Viña del Mar, con canciones y actitudes contestatarias, y con la osadía de rechazar los trofeos del certamen, codiciados por todos los artistas que suben al escenario.
Residente y Visitante, como se hacen llamar los hermanastros que integran el dúo, rompieron todos los esquemas y protocolos del certamen, y se dieron el lujo de seguir cantando hasta las 04.00 de la madrugada del jueves. Se retiraron porque les cortaron el micrófono.
En su espalda desnuda Residente escribió «Fuerza mapuches», en apoyo a los indígenas que luchan por la restitución de tierras ancestrales. Desde el comienzo Calle 13 rompió las formas. Invitó al público a corear un tema que señala «somos indisciplinados», y miles le respondieron de inmediato. Siguieron las críticas sociales y temas como «Vamos a portarnos mal», «La bala» y «Calma pueblo».