Uno de los ladrillos del club The Cavern, un cheque firmado por Ringo Starr, la «auténtica peluca» Beatle están entre miles de objetos relacionados con los «Fab Four» en un museo de Buenos Aires especializado en la legendaria banda inglesa.
El museo es producto de la «Beatlemanía» del argentino Rodolfo Vázquez, un coleccionista privado que se hizo fanático de los cuatro jóvenes de Liverpool cuando tenía diez años. «Me regalaron el disco ‘Rubber Soul’ y con el tema ‘In my life’ me enamoré de los Beatles».
Vázquez juntó todo lo que encontraba en Buenos Aires sobre la banda de rock más famosa de la historia, como discos o recortes de entrevistas. Esta obsesión que fue creciendo con el tiempo se tradujo diez años atrás en la inclusión del argentino en el Libro Guinness como el mayor coleccionista privado sobre los Beatles. El Museo Beatle que inauguró este mes en la turística Avenida Corrientes contiene 2.200 piezas de las más de 8.500 que consiguió reunir y que recuerdan la vida y obra de los Cuatro Fabulosos.