En el mismo día en que las autoridades confirmaron que la actriz Lindsay Lohan es investigada por una supuesta agresión menor contra una empleada del centro de rehabilitación donde la actriz recibe tratamiento, el episodio concluyó con el despido de la trabajadora luego de que ésta ofreciera una entrevista de lo ocurrido en el incidente.
Los resultados de la investigación serán presentados ante la fiscalía del condado de Riverside, que decidirá si iniciarán un caso delictivo, indicó una funcionaria. El Centro Betty Ford, donde se atiende a la actriz, se negó a informar qué fue lo que provocó el pleito, pero indicó que la trabajadora estaba dispuesta a presentar una acusación contra Lohan.
El vocero del centro informó que la trabajadora fue despedida por identificar a pacientes del centro en una entrevista y «divulgó información privilegiada».